En los asentamientos humanos a tres minutos del palacio municipal, Floridablanca muestra su cara “no dulce”
Seres humanos escarbando entre la basura y compitiendo con los chulos por un pedazo de comida; jovencitos y jovencitas vencidos por los alucinógenos y caminando como zombies por entre casas de tabla y senderos enmontados; ventas al por mayor y al detal de toda clase de...