“Floridablanca requiere más que Consejos de Seguridad para detener la ola de homicidios y sicariatos que vienen afectando el buen vivir de las comunidades. Es urgente involucrar en estas problemáticas, además de la Policía, Fiscalía y Ejército, a las instituciones educativas, al ICBF, a la red de cooperantes, a los frentes de seguridad, a las juntas comunales, a los padres de familia, a las iglesias, a los clubes deportivos, a la administración municipal y demás entes oficiales, con el fin de crear un verdadero bloque anticriminalidad que, no solo enfrente las consecuencias de estas acciones, sino que, además, ataque las causas que las generan, que es lo más importante para conseguir una verdadera convivencia”.

Las palabras son de la personera municipal María Margarita Serrano Arenas, luego de conocer que durante este fin de semana fue asesinado a tiros un joven de 21 años en el barrio La Cumbre y, en Cañaveral, sicarios motorizados atentaron contra la vida de un ciudadano de 32 años, del que hasta el momento se desconoce su estado de salud.

Vale recordar que, según datos de la Fiscalía, durante el 2021 en Floridablanca se presentaron siete muertes violentas, pero, en lo corrido del presente año, esa cifra ya va en 20 casos. Esa estadística demuestra que este municipio es el de mayor aumento de homicidios en el departamento de Santander. A estos casos hay que añadirles los atracos, riñas, consumo de estupefacientes, violencia intrafamiliar, abusos sexuales y demás delitos que a diario dan cuenta los medios de comunicación.

“Necesitamos identificar las causas de estas muertes y, con base en esos diagnósticos, diseñar estrategias eficaces para reducirlas. Requerimos unir esfuerzos institucionales y comunitarios para volver a recuperar la tranquilidad. No podemos seguir siendo el Municipio más violento de Santander, los florideños son gentes buenas, honorables y trabajadoras. Como Personería Municipal, estamos dispuestos a atender el llamado a la unidad por una ciudad en donde reine la convivencia pacífica”, señaló la funcionaria.