Desde la Personería Municipal de Floridablanca acogemos y acompañamos a las víctimas de la violencia. Sus esfuerzos por reacomodar sus vidas, a cientos o hasta miles de kilómetros de sus lugares de origen, desde donde fueron desarraigados por el conflicto armado, merecen todo el apoyo de la sociedad civil y de las autoridades competentes.

Las víctimas del conflicto armado también son nuestros hermanos y por eso aplaudimos sus esfuerzos en busca de la paz y la reconciliación. Como garantes de sus derechos humanos, la Personería Municipal facilita su reincorporación a esta nueva sociedad y propende por el cabal cumplimiento de las garantías constitucionales que les permitan una vida digna.

“No hay una lucha que enaltezca más la condición de ser humano, que la búsqueda de la paz. La guerra es destrucción y muerte, la paz es vida, futuro y progreso. La paz es la mayor herencia que le podemos dejar a nuestros hijos, por eso, todos debemos ser luchadores de paz. Desde la Personería Municipal acompañamos a las víctimas del conflicto armado, nuestra solidaridad es permanente. El apoyo institucional y el compromiso de la sociedad civil deben conducir a la reconstrucción plena de la memoria del conflicto armado, a la reparación integral para las víctimas, al esclarecimiento de la verdad, al castigo justo para los actores del conflicto, al perdón, a la devolución de tierras a sus auténticos propietarios y al compromiso pleno a la no repetición de la guerra”, manifestó la personera municipal María Margarita Serrano Arenas, a propósito del encuentro de víctimas de la guerra cumplido el fin de semana en la Casa Paragüitas.

De no ser así, nunca alcanzaremos la paz porque nunca se reconocerá y devolverá la dignidad a las víctimas, quienes cargaron, cargan y cargarán por siempre con el peso más grande del conflicto armado. La deuda con las víctimas no permitirá la reconstrucción plena de la paz en Colombia. Los colombianos estamos en deuda con las víctimas.

Según el Registro Único del Gobierno Nacional, al terminar este año la cifra de víctimas del conflicto armado en Colombia llegaría a los 9.200.000 casos, entre ellos 7.500.000 casos de desplazamiento forzado, un millón de homicidios, 200.000 desapariciones forzadas, 15.000 torturas, 40.000 secuestros, entre otros. De estas cifras, al menos 3.000.000 de casos relacionan a niños.

Si bien nuestra ciudad de Floridablanca no ha sido epicentro del conflicto armado, salvo algunas escaramuzas en zona rural y en el barrio La Cumbre, sí es uno de los municipios receptores de víctimas, llegados del sur del Cesar, sur de Bolívar, el Catatumbo, nordeste antioqueño, la provincia de García Rovira y el Magdalena Medio.

Esos compatriotas llegaron a esta ciudad con la ilusión de recomponer sus vidas, y se asentaron en barrios subnormales, desde donde poco a poco fueron acomodándose a la dinámica social y económica. Algunos de ellos no se han registrado en la oficina de Atención de Víctimas del Municipio, otros han permanecido un tiempo y luego se han ido para municipios diferentes, razones por las que es bastante difícil consolidar un censo verdadero.

Como dijo Mahatma Gandhi hace 80 años: No hay camino para la paz, la paz es el camino.