“Padres de familia: saben ustedes en dónde están sus hijos, con quiénes salen, qué están haciendo. Les hacen seguimiento a sus hijos, dialogan con ellos, juegan con ellos. Estas preguntas elementales deberían tener una respuesta elemental: SÍ. Sin embargo, es lamentable que en nuestra ciudad aún sigan celebrándose fiestas de menores de edad, en las que predominan el sexo y el consumo de alucinógenos y licor, que demuestran la desatención de los papás hacia sus hijos”.

Así reaccionó y con preocupación, la personera municipal María Margarita Serrano Arenas a la información suministrada por la Policía Metropolitana y destacada en los medios de comunicación, según la cual, durante el fin de semana, 120 menores de edad fueron sorprendidos en una fiesta clandestina, en la vereda Los Cauchos, Floridablanca. Los adolescentes se encontraban consumiendo bebidas alcohólicas y también sustancias alucinógenas. Además, los uniformados hallaron en el lugar ocho armas blancas.

El comandante de la Estación La Cumbre, capitán Andrés Pérez, le dijo a Vanguardia que esta fiesta había sido convocada por los mismos menores a través de redes sociales. “Varios adolescentes se citaron para una fiesta de carácter sexual, con drogas como cocaína, tusi, marihuana y también botellas de alcohol. La invitación también contemplaba el acceso a condones y cuartos para los encuentros sexuales”, dijo el policía.

“Padre de familia, rectores, docentes, autoridades… esta situación nos muestra como una sociedad decadente y, no debería repetirse. Por favor, unamos esfuerzos y formemos integralmente a nuestros niños y adolescentes para que construyamos una sociedad sólida, con principios y objetivos claros de desarrollo”, manifestó la Personera Municipal.