Eliminar los criaderos del Aedes Aegypti, una tarea de todos

Con un aumento del 142% en el número de casos, el dengue constituye una seria amenaza de salud pública en Santander. Así lo manifestó el secretario de Salud departamental, Javier Alonso Villamizar Suárez, quien señaló que, en lo corrido del año, la región presenta 1.022 casos notificados, es decir, 600 casos más que el año anterior.

De esos casos, el 10% corresponde a Floridablanca. Bucaramanga y el Distrito Especial de Barrancabermeja marcan la delantera con 22,9% y 13,2%, respectivamente, del total. La mayoría de las notificaciones se han presentado en los grupos de adolescentes (es decir, de 12 a 17 años) con un 23%, y en adultos (que están entre los 29 y 59 años) con un 20%.

Ante este aumento tan desproporcionado de las cifras de dengue en la región, el secretario de Salud hace un llamado a la comunidad para que, en caso de presentar sintomatología asociada con la enfermedad, acuda a los centros de salud para un diagnóstico oportuno y manejo adecuado. Cabe recordar que, entre los síntomas están: fiebre alta (posiblemente hasta de 40 grados), dolor detrás de los ojos, en las articulaciones, músculos, huesos, cabeza y sarpullido en la mayor parte del cuerpo.

Según la Organización Panamericana de la Salud, OPS, el dengue se transmite a través de la picadura de un mosquito infectado, denominado Aedes Aegypti. Es una enfermedad que “afecta personas de todas las edades, con síntomas que varían entre una fiebre leve a una fiebre incapacitante, acompañado de dolor intenso de cabeza, dolor detrás de los ojos, dolor en músculos y articulaciones, y eritema”.

Clases de dengue

En nuestra región se distinguen dos clases de dengue, el primero y más común, conocido como Clásico, cuyos síntomas ya se anotaron arriba. Se le considera no mortal.

Pero, según la Organización Mundial de la Salud, OMS, también existe el dengue Grave o Hemorrágico, en que “el paciente entra en lo que se denomina fase crítica por lo general de 3 a 7 días después de iniciarse la enfermedad. Durante las 24-48 horas de la fase crítica, una pequeña parte de los pacientes puede manifestar un deterioro repentino de los síntomas”.

El dengue Grave es una complicación potencialmente mortal porque presenta derrame de sangre, acumulación de líquidos, dificultad respiratoria, hemorragias graves o falla orgánica. Sus síntomas son: dolor abdominal intenso, vómitos persistentes, respiración acelerada, hemorragias en las encías o la nariz, fatiga, agitación, agrandamiento del hígado (hepatomegalia) y presencia de sangre en el vómito o las heces.

¿Cómo evitar el vector en los hogares?

Según el secretario de Salud departamental, para eliminar los criaderos del zancudo Aedes Aegypti, es importante que en los hogares se ejecuten las siguientes actividades:

1. Semanalmente se debe limpiar el lavadero con cepillo para eliminar larvas y huevos del zancudo.
2. Recoger, eliminar o guardar bajo techo los elementos que puedan acumular agua y se conviertan en criaderos.
3. Si se requiere tener agua almacenada, mantener los recipientes cubiertos para evitar que se contaminen.

Igualmente, es importante que tanto las autoridades competentes como la ciudadanía eliminen posibles focos de criaderos de zancudos, como canaletas, botellas rotas sobre las murallas, tanques elevados, juguetes, bebederos de animales, llantas, neumáticos, todos en desuso y que acumulan agua. En las ciudades son muy comunes los lotes baldíos y obras de infraestructura inconclusas, especialmente estanques y piscinas, que deben recibir mantenimiento periódicamente para acabar con los criaderos. En el caso de Floridablanca, específicamente, los afluentes hídricos, todos contaminados, también son focos en los que anidan los insectos.

“Las cifras no mienten, el dengue es una amenaza para los santandereanos y florideños. La solución está en nuestras manos, siguiendo las recomendaciones de limpieza en nuestros hogares, que nos hace la secretaría de Salud departamental. Sin embargo, las comunidades también requieren que las autoridades competentes no bajen la guardia en el mantenimiento periódico de las obras públicas inconclusas, como el caso de las piscinas del Centro Cultural y Recreativo de La Cumbre, cuyas dos piscinas se encuentran llenas y en desuso desde hace seis años, adquiriendo el agua un color verdoso. La comunidad asegura que esa fecha coincide con el aumento de zancudos y casos de dengue en el sector, pues esas dos piscinas son los dos principales criaderos de insectos”, manifestó la personera municipal María Margarita Serrano Arenas.