Primero: la salud y vida de los niños y jóvenes. Con esta premisa, la Personería Municipal anunció una vigilancia estricta en los colegios públicos y privados de la ciudad a partir del próximo lunes, cuando, de manera presencial, inicia el calendario escolar en esta ciudad.

Justamente, la presencialidad escolar ocurre en pleno pico de la cuarta pandemia de Covid 19 y, esta vez, con su variante Ómicron. Según datos de la secretaría de Salud de Santander, en estos momentos en Floridablanca existen unos 1.600 casos activos de Coronavirus y, al ritmo acelerado que aumenta su contagio, el próximo lunes la cifra superará los 2.000 casos.

La vigilancia de la Personería se enfocará en el cumplimiento estricto de las medidas de bioseguridad, que garanticen la salud y la vida de los estudiantes y, además, faciliten ambientes óptimos para compartir el conocimiento entre docentes y alumnos. Vale recordar que los protocolos de bioseguridad están dirigidos en dos sentidos: de una parte, los establecimientos educativos deberán estar debidamente adecuados, con baños y lavamanos en buen estado y con suficientes reservas de jabón y gel antibacterial para que los educandos puedan hacer uso de ellos constantemente; además de salones, zonas comunes y patios aireados y con buena iluminación.

Así mismo, será obligatorio el uso de tapabocas al interior de los centros educativos. Se establecerán tres filtros sanitarios: el primero en casa, en donde los padres de familia serán los responsables de monitorear a sus hijos y de no enviarlos a clases, en caso de presentar síntomas de Covid-19. El segundo a la entrada de los colegios, en donde a los estudiantes se les suministrará gel antibacterial para que desinfecten sus manos. El tercero en el salón de clases, en donde los docentes comprobarán que los educandos porten correctamente su tapabocas y mantengan sana distancia. El Ministerio de Educación invita a los establecimientos educativos a que, por ahora, se abstengan de realizar ceremonias cívicas y reuniones que impliquen la aglomeración de niños y jóvenes.

Como garante de los derechos fundamentales de los niños, jóvenes, padres de familia y comunidad en general, la Personería anuncia que continuará su vigilancia al Plan de Alimentación Escolar (PAE), a los servicios generales, administrativos, seguridad y conectividad en los colegios, además de un trabajo conjunto con directivos docentes, coordinadores, orientadores y profesores para garantizar un óptimo regreso a la presencialidad escolar. De igual manera acompañará el servicio de transporte escolar, de tal manera que llegue oportunamente a todos quienes lo requieren, pero, además, que se cumpla con el debido distanciamiento dentro de los buses para prevenir contagios.

“El regreso a las aulas de clases es necesario para que exista una verdadera retroalimentación entre alumnos y docentes, pues sólo así el conocimiento puede fluir en los dos sentidos, pero, desafortunadamente, nos coge en pleno cuarto pico de pandemia, lo que nos hace más exigentes y vigilantes en las casas, en los desplazamientos a los diferentes sitios y, en especial, en los establecimientos educativos para estar al tanto de los comportamientos y actitudes de los alumnos. Este es un proceso integral de construcción de futuro, que requiere de la cooperación y la responsabilidad de toda la comunidad, partiendo desde las mismas casas”, manifestó la personera María Margarita Serrano Arenas.