El pozo de La Judía es un sitio ideal para la contemplación, el ecoturismo y la conservación, como quiera que se trata de la fábrica de agua de los florideños; pero, no es apto para el baño y el paseo de olla.

La advertencia es de la personera municipal María Margarita Serrano Arenas, luego de analizar los informes emitidos por el Cuerpo de Bomberos Voluntarios de Floridablanca y la Oficina de Gestión Ambiental y Mitigación del Riesgo de la Alcaldía de Floridablanca, tras la muerte por ahogamiento de dos hombres, ocurridas allí en los últimos 15 días.

Según esos informes, nadar en ese sector es demasiado riesgoso, teniendo en cuenta que las fuertes corrientes y los remolinos que se forman, impulsan a los bañistas hacia una cueva profunda, en donde se ahogan. Incluso, para los rescatistas, es todo un reto recuperar los cuerpos y sacarlos del agua, porque quedan atrapados bajo el agua y ni siquiera es posible acceder con equipos de buceo.

“De nada sirven las advertencias de las autoridades, si los visitantes, florideños, o no, hacen caso omiso y optan por bañarse, sabiendo al riesgo que se exponen. Bañarse en el pozo de La Judía es un acto suicida, al que no se deben exponer más los visitantes. Se trata de uno de los atractivos más valiosos de la ciudad, pero debemos entender que solamente es apto para la contemplación, el ecoturismo y la conservación, porque hace parte del parque natural regional Cerro La Judía, considerada la fábrica de agua de Floridablanca”, manifestó la personera municipal.

Los visitantes también deben descartar allí la realización de paseos de olla, por el riesgo que significan las quemas de capas vegetales y especies florales endémicas, que albergan a un considerable número de aves, mamíferos y reptiles, lo que convierten al Cerro La Judía en un ecosistema estratégico para el departamento de Santander.