Con un profesional experto en problemáticas ambientales, la Personería Municipal acompañará la visita técnica al Parque Natural Regional Cerro La Judía, anunciada por la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (ANLA) para dentro de un mes, con el fin de inspeccionar los impactos ocasionados a ese ecosistema con las obras de la denominada Conectante C1-C2.

Dicha visita es el resultado de una reunión sostenida el fin de semana anterior en Bogotá, entre residentes en el sector oriental-urbano de Floridablanca, líderes ambientales regionales y la concejala florideña Milady Tovar, con funcionarios de la ANLA y la Procuraduría General de la Nación.

Vale recordar que, desde diciembre de 2019, las comunidades residenciadas en la zona de influencia de la obra empezaron a notar los primeros impactos ambientales negativos de este proyecto, que, a la fecha, ha provocado la tala de al menos 5.600 árboles, según cifras de la concesión encargada de los trabajos, Autovía Bucaramanga – Pamplona. Por entre el sector rural, dicha vía pretende comunicar la autopista Bucaramanga-Bogotá, a la altura de las instalaciones de la Universidad Pontificia Bolivariana, con el kilómetro 8 de la carretera Bucaramanga-Cúcuta, con el fin de movilizar el tráfico pesado.

“Acompañaremos la visita técnica que realizarán la ANLA y la Procuraduría al Cerro de La Judía, y esperamos que sus conclusiones se conviertan en el nuevo derrotero de la Conectante C1-C2. Esperamos que durante esa visita se escuchen los diferentes planteamientos de los residentes en la región, de los líderes ambientalistas, de la CDMB y de la concesión y que, con base en los estudios científicos, se adopten las medidas que más convengan al bienestar ciudadano”, manifestó la personera municipal María Margarita Serrano Arenas.

Igualmente, agregó la funcionaria, la Personería Municipal “velará por el cabal cumplimiento del plan de manejo ambiental y la aplicación de las medidas de corrección, prevención, mitigación y compensación requeridos en la ejecución de este proyecto”.

El Cerro de La Judía pertenece al ecosistema estratégico conocido como el Páramo de Santurbán, considerado la mayor despensa de agua del oriente colombiano, como quiera que allí nacen los ríos y quebradas que alimentan los acueductos que suministran el agua de, al menos, tres millones de personas de los dos Santanderes, entre ellas las residentes en las áreas metropolitanas de Cúcuta y Bucaramanga.